No hay que actuar por miedo





Quieren que la gente actúe y decida por miedo, como muchos de los que votaron por Calderón. Por eso intentarían hacer algo que hiciera temer lo peor a la gente. Altemeyer (1996) y otros estudiosos de la Psicología Política, han demostrado que el miedo tiende a provocar en las personas una tendencia hacia el pensamiento autoritario. Esto fue lo que pasó en la Alemania Nazi y en la Guerra Civil Española; crear miedo en las personas para luego ubicar a un supuesto enemigo al que hay que aplicarle represión por parte de un gobierno autoritario. De allí que convenga a los de la extrema derecha ubicar al otro como el violento y generarle el miedo a la gente.

Por otro lado, está el temor de que la gente que participó en la organización de las elecciones pierda credibilidad. Cualquier persona que realiza una responsabilidad pública, uina obligación civil como la de ser funcionaria de casilla, está expuesta a la revisión y no debe preocuparle que los votos que contó se vuelvan a contar. Quien lo hizo bien, deberá sentirse orgulloso cuando su trabajo se declare intachable.

La exigencia del conteo voto por voto surge de lo cerrado de los resultados de la elección y de los errores de comunicación política del IFE y muy probablemente al intento burdo de fraude que se percibe cada vez con mayor intensidad.

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