La voracidad de la clase política es evidente.
En este momento, al cumplirse 100 días del gobierno de Peña Nieto, la legitimación a base de ofertas de dinero al pueblo - las dádivas "contra el hambre" - y de castigo a corruptos - Elba Esther Gordillo, Granier - que supuestamente no son parte de su mafia, lo que enverdad reflejan son la voracidad y la envidia proyectada en la población a la que pretenden gobernar.
No debemos engañarnos, ellos son los voraces, los que pretenden robar desde el inicio del sexenio y los envidiosos destructivos que ahora exhiben la riqueza de sus chivos expiatorios.
Apuestan al olvido, a la resignación y a la desesperanza. Pero cada vez hay mayor conciencia de lo que ellos hacen entre el pueblo y tanto la educación como la información que por medios alternativos circula entre la población, los pone en evidencia, los exhibe en su total podredumbre.
Con la educación popular y la información democrática nos empoderaremos.
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