Cuando se generan demasiadas expectativas al ciudadano por parte del candidato o gobernante, si no hay paciencia de parte del primero u honestidad política del segundo, ocurre la decepción y ésta lleva a la frustración, la decepción, la agresión y la violencia, Desde la posición agresiva, es fácil que los votantes y seguidores, hasta los más leales, cambien de banderas.
Si no se educa a la gente sobre la realidad del sistema en el que vivimos, una fase del capitalismo en la que la acumulación ampliada genera cada vez mayor desigualdad a pesar de las buenas intenciones de los partidos de "izquierda", continuará el proceso de generación de miseria y violencia. Esta generación de conciencia puede producir que la lucha de las bases siga para lograr, no solamente un cambio de régimen político dentro del mismo sistema social, sino abrir una ruta hacia el verdadero cambio global del sistema en que vivimos; una clara revolución social. La participación social comprometida requiere formación política honesta. Esta conciencia popular podría quitar el freno que se la ha puesto desde ciertas áreas del nuevo gobierno mexicano a la transformación social.
Hay que empujar a AMLO y exigirle que sea de a de veras de izquierda y coadyuve a la construcción de gobieros cada vez más socialistas y opuestos al imperialismo por todo el mundo. ¿Suena obsoleto? Pues quien así lo perciba le da igual que siga aumentando la pobreza y slamente disimula para ver si alcanza una cómoda posición en la clase emergente en el poder, siempre dentro del mismo orden social.
No se quisiera pensar que se utilizó un movimiento de bases populares para llevar al poder a un grupo de poder identificado con un centro autoritario, en donde en realidad se encontraría la mayoría de la población mexicana. Si fuera así, la población que se identifica con el verdadero pensamiento de izquierda quedaría muy decepcionada.
Reih (1933: 58), en “Psicología de las Masas del Fascismo” le
adjudicaba a Hitler dos cuestionamientos:
“¿Cómo asegurar la victoria del
pensamiento nacionalsocialista?
¿Cómo combatir eficazmente al
marxismo?...
…Para alcanzar sus objetivos,
Hitler invoca los sentimientos nacionalistas de las masas, pero decide
organizar el movimiento como el marxismo, sobre una base de masas, emplear una
propaganda apropiada y utilizarla de modo consecuente…
…Su propósito por lo tanto – Y el
es el primero en admitirlo – es imponer el imperialismo nacionalista por
métodos tomados del marxismo y de su técnica de organización de masas. Que el
éxito coronara a esta organización de masas es un hecho imputable a las masas y
no a Hitler. Lo que le ha permitido a su propaganda ganarse a las masas ha sido
la estructura autoritaria, antiliberal y angustiada de los hombres…”.
Sería bueno que dentro del mismo Instituto de Formación Política de Morena se diera una revolución ciudadana del conocimiento que genere verdadera conciencia social y no solamente capacitación política para sostener en el poder a la clase política emergente y a los tradicionales que ya son introducto de Morena.
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